¿Cómo hacer para disimular un elefante de la vista de la gente? pregunta el refranero popular y la conocida y original respuesta es: “Se lo mete en una manada de elefantes”. El ejemplo parece a la medida para reflejar lo que es la argentina de hoy y lo que hacen sus mandamases, aunque no precisamente con paquidermos. Aquí lo que abundan y con un crecimiento vertiginoso son los escándalos, hechos de corrupción y desaguisados originados por un gobierno en el que cada uno atiende su juego y nadie le presta atención al juego que necesita jugar la población.
Vale al respecto considerar que ante tantas denuncias, causas judiciales y “toneladas de pruebas” como afirma el fiscal principal de la causa conocida como “la corrupción de Vialidad”, no son pocos los que aplican la regla de esconder al elefante.
Nada mejor para disimular un posible ilícito que generar una “manada” de ellos. Y las apariencias indican que algo así se sospecha. Y basta que salte uno de ellos para esconderlo entre todos los demás.
Solo así se explica la decreciente y así nula reacción de la sociedad ante una realidad que transita cada vez mas por la banquina de lo lícito y legal. Ni hablar de ética y sentido común.
La argentina ´22 es la que muestra a miles de manifestantes conocidos como piqueteros, cortando las principales avenidas de la capital del país y acampando de manera casi inhumana en la principal plaza de la ciudad frente mismo a la casa de gobierno sin que autoridad alguna se dé por enterada de ello, mientras un joven que marchaba a su trabajo y quedó encerrado en el corte al intentar salir del mismo fue interceptado por la policía que cuida el lugar (es decir a los manifestantes) que primero le requirieron la documentación del coche y luego lo obligaron a bajar del mismo, ambas cosas negadas por el automovilista. A la vista de los miles de corta avenidas, extorsionadores, ocupantes de espacios públicos y otros daños, la policía se ocupó de este ciudadano hasta que lograron que descendiera del automóvil para esposarlo y conducirlo detenido en un patrullero a una comisaría. Poco después, para tratar de “disimular” lo ocurrido, el comisario de la misma fue separado de su cargo.
Ciudadano detenido. Comisario separado. Piqueteros dueños de la ciudad.
En paralelo, el secretario de Seguridad de Rosario renunció ante “una verdadera toma de la ciudad por parte de los narcos y bandas de todo tipo” ya imposibles de controlar y en el sur del país sindicalistas y bandas que se hacen llamar descendientes de Mapuches, toman instalaciones, edificios públicos y cometen cuanto desmán deciden. El gobierno nacional los apoya y les concede nada menos que el volcán nacional Lanin, declarándolo “Sitio Sagrado Mapuche”, aunque horas mas tarde debió anunciar que dejaba sin efecto la medida por la violenta reacción del gobierno de Neuquén. El gesto alcanza y sobra para alimentar el espíritu conquistador de estas huéstes (poco argentinas y menos originarias) que no tardarán mucho en venir por este premio.
Argentina ´22.
En este clima, que tiene decenas de muertos todos los días a manos de jóvenes que roban desde un par de zapatillas hasta la bolsa de fideos de una señora, se lleva adelante el juicio oral por una causa que tiene ya 17 años de iniciada por una denuncia de la legisladora Elisa Carrió y donde por sobreprecios, cobros indebidos, cohecho y varias figuras penales mas en la Obra Pública hay trece personas imputadas, con la actual vicepresidente de la República Dra. Cristina Fernández como la jefa de una Asociación ilícita.
Si bien lo que transcurre es el alegato fiscal que llevará nueve jornadas (se han cumplido cuatro) no son pocos los juristas prestigiosos que ya adelantan un pronóstico de condena para la ex jefa de estado ante el cúmulo de pruebas que está aportando dicho alegato.
Por si hace falta, todo en medio de una inflación que casi trepó al 8 % en el último mes y que suma el 60 % en lo que va del año, salarios vigentes de indigencia (35/40 mil para municipales y jubilados por ejemplo) y tarifas de servicios aumentando hasta en un 200 %.
Argentina ´22.
En ese contexto, donde es evidente que la manada es grande, es llamado el presidente de la Cámara de Diputados y socio de la coalición gobernante, Sergio Massa a hacerse cargo del ministerio de Economía, con otros ministerios sumados y con toda la parafernalia de pasar a ser en realidad el verdadero jefe de gobierno de la nación.
Viene a tratar de dar vuelta la agónica situación. “Viene a generar confianza” afirmaron los voceros.
En base a información recogida en esa zona, medios de este grupo, respaldados por la dirección de un importante medio periodístico del mismo lugar, dan cuenta por estas horas de una operación inmobiliaria en la localidad de San Andrés de Giles por 8 millones de dólares, por la cual se vendió la estancia Harás La Vanguardia de casi 600 hectáreas con notables instalaciones y de singular belleza que ya ha pasado a ser llamada en la zona como “el campo de Massa”.
Es que fue el actual ministro y su esposa (directora de AYSA, organismo nacional de Aguas) quienes revisaron en dos oportunidades el campo antes de la operación y fueron quienes concretada la misma, se alojaron todo el primer fin de semana en la casona principal y luego continuó yendo hasta sin su esposo la señora Galmarini. Con notable despliegue ya trabaja en el mismo una empresa constructora “de Tigre”, y está en marcha una pista de aterrizaje y …….
“Es de mi amigo Daniel…..” respondió Massa ante la obligada consulta. El mismo amigo que dijo que era el dueño del departamento en Miami en 2013 cuando le adjudicaron ese inmueble de un millón de verdes.
Argentina ´22 necesita la confianza mencionada. Vaya si la necesita.
Y eso solo se obtiene con comportamientos ejemplares. Siendo, pero aún más pareciendo.
Ningún esfuerzo para que el amigo Daniel demuestre esa propiedad será poco.
Ni tampoco los que haga la vicepresidente para plasmar su inocencia en los casos que la involucran.
Y todos los que tengan situaciones similares, actuales o anteriores. De este y de otros gobiernos.
Porque el límite ya se alcanzó. No hay el más mínimo margen para sostener todo esto.
Y por ahora, la foto, solo muestra la interminable manada. Tan grande que puede afirmarse que no entra en ella ningún elefante mas.
Ya ni siquiera una criatura de esos mamíferos placentarios.
(Editorial publicada en el Semanario TIEMPO de Ranchos del viernes 12 de Agosto de 2022).