En un vuelo del miércoles a la noche partió rumbo a Italia el boxeador ranchero Nicolas Demario. Lo hizo respondiendo a una invitación de quien fuera su rival en su única pelea internacional Luciano Randazzo con quien Demario cayera por puntos en un combate que por cierto había ganado en el trámite y en el que faltó muy poco para que noqueara al entonces campeòn de los superligeros de ese país.Ahora Randazzo peleará por recuperar por tercera vez la corona en Montúa a unos 160 Kms de Milan y el ranchero aceptó la invitación de ir a colaborar con la preparación de Randazzo. Pero lo mas saliente estuvo en sus declaraciones en la mañana de TIEMPO de Radio con Leandro Solferino, Rodrigo Visciglia y Ruben Martinez. «Me decidí a viajar después de mi última pelea» dijo. Vale recordar que en ese combate perdió ante un rival sin relieve por puntos en una actuación para el olvido. «Esa noche subí al ring tan confiado que ni siquiera tomé conciencia que era una pelea en serio» dijo y ante la consulta si desde el rincón no lo hicieron reaccionar, respondió: «Algo me dijeron pero ya tenía el chip puesto y no pude cambiar. Creo que debieron faltarme el respeto para que reaccionara. Me voy a cambiar de aire y a reflexionar. Algo seguramente aprenderé y tengo la posibilidad de pelear en el mismo festival de Randazzo». Ante la pregunta sobre si pensaba quedarse en Europa fue directo: «No voy pensando en nada de eso. Voy por un mes sin pensar que pasará. No pienso en nada ni descarto nada. Lo voy a disfrutar y a pensar en otro lugar y con otra gente. Veremos que pasa…» Un Nico Demario que una vez mas a la hora de declarar muestra una madurez y una sensatez que solo gana admiración. Allá va…. destino recibilo
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