El entrenador de Atlético Ranchos Pablo Gómez vivió momentos muy tensos cuando de resultas de un operativo de control de tránsito en el acceso a la ciudad de Ranchos, se produjo una discusión con los efectivos policiales que reaccionaron desmedidamente y tras arrojarlo al piso y propinarle algunos golpes lo trasladaron esposado a la estación policial y luego de la misma forma al Hospital Campomar para ser examinado por los médicos de guardia.
“Fue un momento terrible. Y peor lo que se dijo después. Llegaron a decir que yo estaba borracho y aunque jamás en mi vida tomé alcohol esas cosas hacen mucho daño. Con mi hermano tenemos una escuelita de fútbol a la que concurren 80 chicos y ahí enseñamos mucho más que fútbol. Enseñamos a decir buenos días, permiso, si señor y otras costumbres como me enseñó mi viejo. Respeto por encima de todo y de pronto verme envuelto en comentarios como esos me dolieron mucho….”
Luego dio su versión de lo ocurrido en el acceso de la ruta 29. “En realidad yo estaba trabajando con los chicos y el que entraba a la ciudad con la combi era mi hijo al que detuvieron y le hallaron una documentación vencida. Me llamó y fui a resolver la cuestión, sobre todo porque había una agente de Belgrano que es conocida mía. Al llegar al lugar, otros dos agentes, uno de ellos Cabrera de Ranchos con cuyo padre he jugado mucho al fútbol me trataron agresivamente. Quiero dejar en claro que yo no discutía la infracción. Pero me molestó el trato. En ese momento pasa un auto de una persona conocida de Ranchos sin patentes y ninguna documentación. El conductor se agarró la cabeza y solo atinó a decirles que iba a unas pocas cuadras y que no había levantado nada de esa documentación y lo dejaron ir sin problemas. Ahí perdí el control y les dije algunas cosas. Por ejemplo: Las cámaras que decís que controlan todo me controlan solo a mi? Les pregunté y ahí me torcieron un brazo, me arrojaron al piso y me colocaron las esposas. Una barbaridad. Tuve que entrar al hospital esposado a la vista de todos los vecinos como si fuera un delincuente…”
Gómez continuó con su relato: “Quiero agradecer al intendente Álvarez y al comisario Sánchez que me atendieron muy bien y resolvieron mi caso enseguida. Y se que han sancionado a los policías, pero ahora tengo todo en manos de mi abogada y veremos que hacer. Porque estos muchachos deben estar preparados para actuar en estas situaciones y no ser los mas nerviosos. Porque en cualquier momento a alguien le pegan un tiro o lo lastiman mal…..”
Pablo Gómez tuvo tiempo para hablar del buen momento de Atlético Ranchos que “tiene una dirigencia fenomenal y un plantel en todas sus divisiones excepcionales” y por supuesto hablar de Argentina en Rusia. “Claro que deseamos lo mejor para la selección pero lo que no se trabajó antes no esperemos que se haga ahora. Ojalá lleguemos lejos…..”
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